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Espacios para lesbianas del sur de Florida son escasos, sepa porqué

Cuando se piensa en la escena LGBTQ+ de Miami, rara vez vienen a la mente las mujeres queer y los espacios para lesbianas. Probablemente surjan imágenes de Miami Beach, con la arena caliente entre los dedos de los pies y los gays abrasados por el sol sonriendo con trajes de baño de brillantes dibujos. Tal […]

Por Allan Brito
Espacios para lesbianas del sur de Florida son escasos, sepa porqué
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Cuando se piensa en la escena LGBTQ+ de Miami, rara vez vienen a la mente las mujeres queer y los espacios para lesbianas. Probablemente surjan imágenes de Miami Beach, con la arena caliente entre los dedos de los pies y los gays abrasados por el sol sonriendo con trajes de baño de brillantes dibujos. Tal vez piense en Gramps, con sus noches drag, sus cócteles seductores y su ambiente acogedor.

En los años 80, había unos 200 bares de lesbianas en Estados Unidos. Ahora hay unos 15, reportó Miami New Times.

Y después de que New Moon en Wilton Manors cerrara en 2014, no hay bares exclusivamente de lesbianas en toda Florida, lo que deja en manos de eventos como Girls in Wonderland, la fiesta de junio organizada por Pandora, el mantenimiento de esos espacios lésbicos. (El Apto. 9F en Wilton Manors es de propiedad y gestión de lesbianas, pero no atiende exclusivamente a una clientela lesbiana).

“En sus inicios, Pandora fue creada por [Amy Alonso y Yesenia Leon]. Querían crear una fiesta fresca y muy sexy. Crearon una fiesta y luego un par más, y entonces me uní a ellas”, dice Burgos. “Eso ocurrió hace 22 años, en 1999. Sólo querían crear algo sexy, bonito y una experiencia de baile realmente genial. Creamos la primera Women’s White Party, y después, Girls in Wonderland, que es ahora el mayor festival femenino del país”.

Mientras esos eventos esporádicos prosperan, los espacios dedicados a las lesbianas siguen cerrando.

Ahora, casada y con una familia, Burgos dice que vivir fuera y con orgullo no era posible en aquellos tiempos. Los bares y las fiestas de lesbianas no eran simplemente espacios de entretenimiento; eran refugios seguros donde las mujeres queer podían ser ellas mismas.

Desde la apertura de un popular club nocturno de lesbianas hasta la redacción de unas memorias sobre su historia personal de amor queer, los logros de Cohen son demasiado amplios para enumerarlos en su totalidad. Hasta su muerte, vivió en Miami con su mujer, Beth. En el sur de Florida, desempeñó un papel importante en la escena lésbica.

Gracias a mujeres como Cohen, las lesbianas pueden entrar en cualquier local sin miedo. Las mujeres homosexuales pueden casarse y formar familias. Burgos cree que ésta es la razón por la que los bares y espacios para lesbianas han disminuido. También señala cómo las relaciones lésbicas funcionan de forma diferente a las de los hombres gays cisgénero.

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