Sears se acoge al capítulo 11 y cierra 142 tiendas

Sears solicitó la protección de bancarrota del Capítulo 11 el lunes, cedió ante la enorme deuda y pérdidas acumuladas.

Por Redacción MiamiDiario

La gran interogante es si una versión reducida de la compañía que alguna vez dominó el panorama minorista estadounidense puede seguir siendo viable o si la icónica marca se verá obligada a cerrrar sus puertas.

Sears, que comenzó como un catálogo de pedidos por correo en la década de 1880, ha estado avanzando lentamente hacia el cierre, ya que se retrasó con respecto a sus pares e incurrió en grandes pérdidas a lo largo de los años.

“Esta es una compañía que en la década de 1950 era como un coloso en el panorama minorista estadounidense”, dijo Craig Johnson, presidente de Customer Growth Partners, una consultora minorista. “Con suerte, un Sears nuevo más pequeño será más saludable”.

La compañía ha luchado con tiendas obsoletas y quejas sobre la mala calida de servicio de atención al cliente. Eso contrasta con cadenas como Walmart, Target, Best Buy y Macy’s, que han estado disfrutando de ventas más sólidas al beneficiarse de una economía robusta y de los esfuerzos para hacer que la experiencia de compra sea más atractiva invirtiendo en la remodelación y actualización de sus tiendas.

Sears Holdings, que opera tanto en las tiendas Sears como en las tiendas Kmart, cerrará 142 tiendas no rentables hacia fines de año, y se espera que las ventas de liquidación comiencen en breve. Esto se suma al cierre de 46 tiendas no rentables que ya se habían anunciado.

Edward S. Lampert renunció como CEO pero seguirá siendo presidente de la junta. Una nueva Oficina del CEO será responsable de administrar las operaciones diarias.

Sears se une a una creciente lista de minoristas que se han declarado en bancarrota o se han liquidado en los últimos años en medio de un clima ferozmente competitivo. Algunos, como Payless ShoeSource, emergieron con éxito de la reorganización en la corte de bancarrota.

Pero muchos otros como Toys R Us y Bon-Ton Stores Inc. no lo han hecho. Ambos minoristas se vieron obligados a cerrar sus operaciones este año poco después de acgerse al Capítulo 11.

Gran repercusión

Debido a su tamaño, la declaración de quiebra de Sears tendrá una gran repercusión en todo, desde los propietarios ya debilitados hasta sus decenas de miles de trabajadores.

Lampert, el mayor accionista, ha prestado su propio dinero durante años y ha elaborado acuerdos para apuntalar a la compañía, lo que a su vez ha beneficiado a su propio fondo de cobertura ESL.

El año pasado, Sears vendió su famosa marca Craftsman a Stanley Black & Decker Inc., siguiendo movimientos anteriores para escindir piezas de su división Sears Hometown and Outlet y Lands ‘End.

En las últimas semanas, Lampert ha estado presionando para una reestructuración de la deuda y ofreciendo comprar algunos de los activos clave de Sears, como Kenmore, a través de su fondo de cobertura, ya que el pago de la deuda de $ 134 millones venció el lunes. Lampert posee personalmente el 31 por ciento de las acciones de la compañía, mientras que su fondo de cobertura tiene una participación del 18,5 por ciento, según FactSet.

“Está muy bien emprender ingeniería financiera, pero la compañía está en el negocio del comercio minorista y sin un plan minorista claro, la empresa simplemente no tiene ninguna razón para existir”, dijo Neil Saunders, director gerente de GlobalData Retail.

Las acciones de Sears han caído desde alrededor de $ 6 en el último año a menos del nivel mínimo de $ 1 que las acciones de Nasdaq deben comerciar para permanecer en el índice de acciones. En abril de 2007, las acciones se cotizaban a alrededor de $ 141. La compañía, que una vez tuvo 350,000 trabajadores, ha visto que su fuerza laboral se reduce a menos de 90,000 personas a principios de este año.

A partir de mayo, tenía menos de 900 tiendas, por debajo de un máximo de 4,000 en 2012.

En una presentación del gobierno de marzo de 2017, Sears dijo que existían “dudas sustanciales” de que pudiera mantener sus puertas abiertas, pero insistió en que los esfuerzos de recuperación mitigarían ese riesgo.

Lampert se comprometió a devolver a Sears a la grandeza al aprovechar sus marcas más conocidas y sus vastas propiedades, y más recientemente planificó atraer a los clientes con un programa de lealtad. Pero las pérdidas continuaron y la compañía luchó para que más personas cruzaran las puertas o comprar en línea.

Las ventas en las ubicaciones establecidas de la compañía cayeron casi un 4 por ciento durante su segundo trimestre fiscal. Aún así, eso fue una mejora con respecto al mismo período del año anterior. Los ingresos totales cayeron un 30 por ciento en el trimestre más reciente, perjudicado por los continuos cierres de tiendas.

“El problema en el caso de Sears es que es un minorista pobre”, escribió Saunders en su análisis. “Dicho sin rodeos, ha fracasado en todas las facetas de la venta minorista, desde el surtido hasta el servicio, la mercancía y los estándares básicos de mantenimiento de la tienda. “En condiciones benignas, esto sería lo suficientemente problemático, pero en el entorno minorista altamente competitivo de hoy en día es una receta para el fracaso a gran escala”.

Durante décadas, Sears fue el rey del panorama comercial estadounidense. El icónico catálogo de Sears, Roebuck and Co. presentaba artículos desde bicicletas hasta máquinas de coser y casas, y podía generar entusiasmo en todo el hogar cuando llegaba.

La compañía comenzó a abrir tiendas minoristas en 1925 y se expandió rápidamente en centros comerciales suburbanos desde los años cincuenta a los setenta.

Pero el inicio de la tiendas de descuentos como Walmart creó desafíos para Sears que solo han crecido. Sears enfrentó aún más competencia con los vendedores en línea y minoristas de electrodomésticos como Lowe’s y Home Depot.

Mientras tanto, los trabajadores de Sears están nerviosos en torno al tipo de indemnización que recibirán si cierran sus tiendas.

John Germann, de 46 años, trabaja a tiempo completo y gana $ 14 por hora como capataz de descarga de mercancías de camiones en la tienda de Chicago Ridge, Illinois; una de las que ha estado reduciendo drásticamente su personal desde que comenzó hace nueve años. Germann ahora tiene solo 11 personas en su equipo, en comparación con unas 30 hace unos años.

Con información de AP