¡Atención! Estos son los increíbles beneficios de las semillas del melón

El melón es una de las frutas más consumidas del verano por su dulce y refrescante sabor. Lo normal, es que al comerlo las semillas acaben en la basura, y eso es porque muy pocas personas conocen sus múltiples beneficios.

Este tentempié puede convertirse en una opción saludable para recibir nutrientes que en ocasiones son descuidados de la dieta diaria.

Mejoran el sistema inmune

Las semillas del melón tienen un alto contenido en vitaminas A, B6, B12, D y E, esenciales para el buen funcionamiento del cuerpo, además de que regula la formación de células en la sangre y tejidos.

Asimismo, al consumir estas semillas, se reciben otros nutrientes importantes como calcio, potasio, hierro o magnesio, además de minerales. También su contenido en proteína vegetal (21 gramos por cada 100 gramos de semillas), las convierte en una opción ideal para las dietas veganas o vegetarianas, que no consumen proteínas de tipo animal, reseñó El Español.

El consumo de este “superalimento” mejora sistema inmunológico, por lo que es muy recomendable para prevenir gripes y resfriados o, incluso, enfermedades infecciosas.

Ayudan el sistema digestivo

Al tener un alto contenido en fibra, este alimento evita el estreñimiento y otros problemas intestinales relacionados con el colon.

Este contenido en fibra, además, tiene otro beneficio. Y es que al mejorar el tránsito intestinal, también ayuda a controlar el peso. Algo que también ocurre cuando se consume la carne del melón.

Previenen enfermedades cardíacas

Las semillas del melón tienen un alto contenido en ácido linoleico, un ácido graso esencial que el organismo no puede crearlo y tiene que ser adquirido a través de la dieta. Lo que hace este nutriente es ayudar a reducir grasas perjudiciales para el organismo como el colesterol y triglicéridos.

Cómo consumirlas

Pueden ser conservadas en un tarro de cristal en la nevera y utilizarlas como condimento de las ensaladas.

También pueden meterse en el horno para que estén ligeramente tostadas y, si se quiere, añadir alguna especia para enriquecerlas de flavonoides.

De igual forma, se pueden consumir en forma de refresco, pero para ello es necesario lavarlas, escurrirlas, triturarlas y mezclarlas con melón troceado y algo de agua. Después, se recomienda conservarlo durante tres horas en el frigorífico.

Las infusiones con el extracto de las semillas del melón suponen una opción muy recomendable por la noche. Esta bebida, por sus componentes, puede favorecer que la retención de menos líquidos en el cuerpo.