Maduro y Ortega: paralelismo en violación sistemática de Derechos Humanos

Tanto Nicolás Maduro, en Venezuela, como Daniel Ortega, su homólogo en Nicaragua, además de coincidir en sus métodos dictatoriales, usan el mismo discurso para sobrellevar las multitudinarias protestas antigubernamentales que sus políticas han generado.

En 2017, Venezuela vivió durante 4 meses bajo protestas, en su mayoría reprimidas por las fuerzas gubernamentales; que se originaron luego de que el Gobierno alterara el hilo constitucional en el país. En esos meses de alta tensión y con media nación paralizada, hubo 1.351 encarcelados y 127 muertos oficialmente (157 extraoficialmente).

Por otra parte, desde abril de 2018, Nicaragua vive una situación parecida a la de Venezuela el año pasado. Luego de que el Gobierno de Ortega promulgara leyes que aumentaban los impuestos y cambiaban las pensiones para intentar rescatar al fallido sistema de seguridad social (Instituto Nicaragüense de Seguridad Social, INSS), se originaron protestas que ya llegaron al tercer mes con más de 300 muertos, en su mayoría, a manos de fuerzas armadas de Ortega.

El lunes, 23 de julio, Daniel Ortega ofreció una entrevista a  Fox News donde negó cualquier realidad de su país. En este sentido, se hace imposible no comparar las mentiras que ambos mandatarios dijeron durante los meses de tensión, pero que no los salvaron de denuncias ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), por su métodos abusivos y represivos. A continuación un conteo:

1.- “No hay represión”

Maduro
En junio de 2017, el presidente Maduro aseguró que, tanto la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) como la Policía Nacional Bolivariana (PNB), usa en protestas “solo agua y gasecitos”, ya que tienen “prohibido” el uso de armas letales. Sin embargo, las manifestaciones dejaron 157 muertos (extraoficial) y 15 mil heridos.

Ortega
Daniel Ortega, por su parte, aseveró que “ninguna de las manifestaciones pacíficas han sido atacadas”. Pero, la realidad dice que sí, ya que la represión gubernamental ha dejado más de 350 muertos y más de 2.100 heridos, según el último informe de la Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos (ANPDH).

2.- “Paramilitares no son del Gobierno”

Maduro
En mayo de 2017, Maduro acusó a la alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) de tener, en paralelo, una “estructura paramilitar”, dirigida desde la ciudad colombiana fronteriza de Cúcuta y que planifica “ataques” en el marco de las protestas contra su Gobierno.

Pero, las imágenes y videos demostraron la complicidad de la Policía y Guardia Nacional con los colectivos armados, o paramilitares, durante las protestas.

En la Urbina,amparados por efectivos GNB!Que el mundo vea!No van a poder ocultar sus desmanes y los vamos a derrotar los vzlanos! pic.twitter.com/hJkAbHsGXF

— Henrique Capriles R. (@hcapriles) May 2, 2017

https://twitter.com/paolucci40/status/859497283129401345

Ortega
Afirmó durante la entrevista con Fox News que las fuerzas paramilitares responden a organizaciones políticas de oposición. Pero, al igual que en Venezuela, el material difundido en redes sociales evidencia cómo los paramilitares pro-Ortega trabajaban con la protección de la Policía Nacional y llevan banderas del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) en los vehículos en los que se movilizan.

3.- “No hay protestas”

Maduro
Cuando apenas iniciaban las protestas antigubernamentales, en abril de 2017, Maduro aseguró en cadena nacional que “hoy toda Venezuela está en paz (…). Y pequeño focos violentos. Con la autoridad de la Constitución, fueron hoy neutralizados”. Las protestas terminaron en agosto de ese año.

Ortega
“Ya tenemos como una semana en que han cesado los disturbios. Lo que hay es una normalización del país”, manifestó Ortega durante la entrevista. Sin embargo, los reportes de la prensa independiente y de los mismos manifestantes demuestran lo contrario.

Entre otros sucesos, el 17 de julio hubo un ataque al histórico barrio de Monimbó, en Masaya, que dejó cuatro muertos, según el reporte de la Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos (ANPDH). El día antes hubo ataques en Diriá, Diriomo y Niquinohomo.

4.- Rechazaron adelanto de elecciones

Una de las exigencias de los protestantes de Venezuela y ahora de Nicaragua, era el cambio de gobierno. Pedían adelanto de elecciones presidenciales libres y democráticas. Pero, esto fue lo que respondieron los mandatarios:

Maduro
“Ellos (oposición) insisten en un cronograma electoral. El cronograma está establecido, las elecciones regionales en octubre, las municipales a comienzo del próximo año y las presidenciales en el último trimestre de 2018”, dijo el Presidente de Venezuela en su programa de radio y televisión “Domingos con Maduro”. Y destacó: “El cronograma electoral ya está establecido. Lo que piden es ganas de decidir lo que ya existe”.

Ortega
“Aquí las reglas las pone la Constitución de la República, a través del pueblo. Las reglas no pueden venir a cambiarlas de la noche a la mañana, porque se le ocurrió a un grupo de golpistas”, dijo por su parte Ortega, ante sus simpatizantes. Además, calificó a sus adversarios como “asesinos”, “delincuentes” y “terroristas”, palabras que también suele usar su homólogo venezolano.

5- “Paz” y  “diálogo”

Ambos mandatarios usaron el “diálogo” para apaciguar las protestas en su contra y ganar tiempo. En el caso de Venezuela, Maduro logró su objetivo en 2014 y 2017; La oposición pedía en el diálogo elecciones con garantías, posteriormente, el Gobierno impuso ilegalmente la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), para contrarrestar a la Asamblea Nacional (AN), legítimamente electa por más de 16 millones de votos.

Un poder supraconstitucional y plenipotenciario que no ayudó en nada a la grave crisis venezolana. Todo lo contrario, el Fondo Monetario Internacional (FMI) prevé que la inflación del país cerrará 2018 en un millón por ciento, y que el Producto Interno Bruto (PIB) caerá 18%. Venezuela se enfrenta a su quinto año de recesión económica, con una hiperinflación que ahoga a los ciudadanos.

En Nicaragua, el llamado a la paz y al diálogo que Ortega hizo en abril de 2018 no le resultó. En ese momento, el mandatario aseguró que “el dialogo es fundamental para resolver cualquier conflicto desde familiar hasta las relaciones de trabajo, conflictos sociales”.

El diálogo en Nicaragua se realizó, pero, sin los efectos que esperaba Ortega, ya que las protestas continuaron y —hasta la fecha— han dejado 350 muertos.

Fuente: Venezuela al Día