MLB aprueba nuevas reglas para 2023: cambiarán todo el juego

Con el arribo de la nueva temporada de las Grandes Ligas, el campeonato anunció tres nuevas reglas. El objetivo de estos cambios es mejorar la seguridad, hacer un juego más justo y que los partidos sean más cortos.

Sin duda alguna, la regla más llamativa es el cronómetro de pitcheo. ¿A quién no le ha pasado alguna vez que después de 3 horas, los juegos empiezan a parecer tediosos? De hecho, la mente humana no está diseñada para pasar tantas horas concentradas en una sola actividad.

Por esta razón, desde hace años, las Grandes Ligas busca reducir el tiempo de juego. Habrá un cronómetro de 30 segundos entre bateadores. El lanzador tendrá 15 segundos para realizar su lanzamiento cuando las bases estén vacías y 20 segundos cuando estén llenas.

Si el lanzador inicia su movimiento de picheo y el cronómetro llega a cero antes de que suelte la bola, no será penalizado.

Por otra parte, el lanzador tiene la oportunidad de efectuar dos “desenganches” por bateador que enfrente. Es decir, sacar el pie de la placa. Esto aplica también para realizar lanzamientos a las bases en caso de que quieran controlar a un corredor. En este sentido, si el pitcher decide lanzar una tercera vez a la base y es quieto, el corredor avanzará automáticamente.

En caso de que el lanzador se salga de tiempo, se le penalizará con una bola automática. De igual forma, los bateadores deben estar en la caja de bateo antes de que el cronómetro marque 8 segundos. En el caso de que no sea así, recibirán un strike automático. Los bateadores pueden pedir un tiempo muerto por turno.

Con estos cambios, el tiempo promedio de un juego de 9 entradas de Ligas Menores se redujo en 26 minutos.

Restricciones a los shifts

El shifts defensivo viene siendo para el béisbol, lo que las formaciones son para el fútbol. Por ejemplo, cuando un zurdo viene a batear, toda la defensiva se posiciona entre la segunda y primera base, donde estadísticamente van la mayoría de sus batazos.

Con esta estrategia, los equipos han reducido significativamente el promedio de bateadores embazados, sobre todo zurdos. A las Grandes Ligas no parece agradarle del todo, que los bateadores tengan menos posibilidades de conectar impares. Por esta razón decidieron prohibir este tipo de formaciones.

El equipo a la defensiva debe tener un mínimo de cuatro jugadores en el infield, con al menos dos infielders completamente ubicados en uno de los lados de la segunda base. Es decir, cada uno cubriendo la posición que naturalmente le corresponde.

Bases más grandes

El último cambio a las reglas tiene que ver con la seguridad. Las bases pasarán de medir 15 pulgadas a 18. El objetivo es que ocurran menos choques en los partidos.

Sin embargo, esto provocó un efecto secundario. Y es que ahora las bases van a estar algunas pulgadas más cerca.